El regreso de las vacaciones y la vuelta a la rutina tienen muchas implicaciones para toda la familia. Se retoman las rutinas, los horarios más o menos fijos y el grupo familiar se dispersa a diario para cumplir con sus respectivas obligaciones. Y en esa disgregación cotidiana, acompañada de tiempos justos y estrés, la salud bucodental de los niños de la casa puede ser la gran perjudicada.
Esto se debe a que, con la vuelta al cole, los padres pierden el control sobre la higiene dental de sus hijos en varios momentos del día, como el desayuno a media mañana, el almuerzo o la merienda. Lo que puede perjudicar su salud bucodental si no se les han inculcado hábitos de limpieza adecuados o si la alimentación que llevan a cabo es rica en azúcares y sustancias nocivas para los dientes.
Por lo general, los pequeños comen en el colegio varias veces al día. Lo ideal sería que tras cada una de esas ingestas se realizasen un cepillado de dientes. En este sentido, es importante haberles creado previamente una rutina de higiene dental, de modo que sientan la necesidad de lavarse los dientes tras cada comida de forma natural. Para ello resulta muy efectivo cepillarse los dientes con los niños cada vez que sea posible, pues suelen tomar a sus adultos como modelos de conducta e imitarles. Además, en esa higiene bucodental conjunta se les podrá guiar para perfeccionar su limpieza y elogiarles, de modo que se sientan motivados a seguir haciéndolo. Existen kits dentales sencillos de transportar que son ideales para llevarlos al colegio.
No obstante, pese a los esfuerzos de cualquier padre para crear este tipo de rutinas, lo cierto es que resulta complicado que los niños se laven los dientes tras el recreo o el almuerzo en el comedor escolar. Ya que se encuentran en un entorno de juegos y diversión que dificulta la tarea.
Alimentos para mantener la salud bucodental del niño
Por ello, los padres pueden llevar a cabo otra serie de iniciativas relacionadas con la alimentación que ayuden a preservar la salud bucodental infantil. Fundamentalmente se trata de eliminar alimentos ricos en azúcares para desayunos, almuerzos y meriendas lejos de casa, como bollos o galletas. Y sustituirlos por bocadillos, frutas y zumos naturales.
Además de procurar que los pequeños consuman alimentos sin muchos azúcares, los padres también pueden incentivar el consumo de productos que ayuden a fortalecer los dientes y las encías, como la leche, sus derivados y los frutos secos sin procesar (todos ricos en calcio), frutas como las manzanas y verduras como las zanahorias, que mejoran la higiene dental y previenen la inflamación de las encías.
Visita al dentista
Por otra parte, también es recomendable hacer una visita al dentista antes de comenzar el curso escolar. Así, un profesional podrá determinar el estado de la salud bucodental del niño tras el verano, la pertinencia de realizar o no una limpieza dental y proporcionar los consejos de higiene dental adecuados para su caso particular.
Para ello, ponemos a tu disposición los servicios y la experiencia de nuestros profesionales en nuestra clínica dental de Orihuela. Consúltanos sin compromiso a través de nuestra web o llamando al 96 530 06 40.